El masaje del seno carotídeo para el diagnóstico y la terminación de la taquicardia supraventricular (TSV) sigue siendo una maniobra vagal ampliamente utilizada en el departamento de A&E. Sin embargo, su eficacia es limitada (terminación de la taquicardia supraventricular en aproximadamente el 20%) y el masaje del seno carotídeo puede complicarse con complicaciones neurológicas (potencialmente devastadoras) en el 0,2-1% de los pacientes. Existen intervenciones más seguras sin complicaciones neurológicas, como la maniobra de Valsalva modificada (eficacia del 43%) y la administración intravenosa de adenosina (eficacia del 75%). Se requiere la observación del ritmo cardíaco, tanto para las maniobras vagales como para la administración de adenosina, debido a la posibilidad de inducción de taquicardia ventricular o fibrilación ventricular (incidencia 0,08%). El masaje del seno carotídeo sigue siendo un método diagnóstico importante en pacientes con síncopes inexplicables en los que, basándose en la historia clínica, se sospecha de hipersensibilidad del seno carotídeo. Debe evitarse en pacientes con AIT o ictus previos en los últimos 3 meses, o en aquellos con hematomas carotídeos, excepto si los estudios Doppler carotídeos han excluido una estenosis significativa (≥ 70%).