Una cuota de regalías es una cuota continua que el franquiciado paga al franquiciador. Este canon suele pagarse mensual o trimestralmente, y suele calcularse como un porcentaje de las ventas brutas.
Cuotas de afiliación continuas
Mientras que el canon inicial de la franquicia puede verse como el coste inicial para unirse como «miembro» del sistema de franquicia, los pagos de royalties pueden verse como las «cuotas de afiliación» continuas necesarias para seguir siendo miembro. Estos pagos son recaudados por el franquiciador para financiar las acciones de la entidad franquiciadora, que incluyen tanto los gastos corporativos como los relacionados con la franquicia. Los pagos continuos de cánones son la forma en que el franquiciador obtiene su dinero, que utiliza para apoyar a sus franquiciados y seguir construyendo el negocio.
Generalmente, todo el apoyo proporcionado por el franquiciador a través de sus consultores de campo, planes de marketing, estrategias de negocio, etc., se financia a través de los pagos de cánones proporcionados por los franquiciados. Además, todos los costes administrativos del funcionamiento de la sede y del personal del franquiciador se financian con los pagos del canon. Por último, los esfuerzos del franquiciador para seguir expandiendo y desarrollando la marca mediante el reclutamiento y la incorporación de nuevos franquiciados al sistema se financian con los cánones.
Cómo se calculan los cánones
Hay varias formas en que los franquiciadores establecen cuál será su canon continuo. La más común es un porcentaje de las ventas brutas que gana el franquiciado. Normalmente, este porcentaje oscila entre el cinco y el nueve por ciento. Así que, esencialmente, el franquiciado se lleva el 91-95% de sus ventas brutas y el resto va al franquiciador. Las ventas brutas son el importe de los ingresos procedentes de la venta de servicios, bienes y cualquier otro producto o mercancía por parte del franquiciado, y no se ven reducidas por los descuentos concedidos a los empleados o a los miembros de la familia, los impuestos o las devoluciones/abonos/ajustes.
En la mayoría de los sistemas de franquicia este porcentaje es fijo, pero también puede ser un porcentaje creciente o decreciente en función del nivel de ventas. Algunos franquiciadores exigen un pago mínimo de royalties para cada periodo, ya sea por un porcentaje o por una cantidad fija en dólares. También hay franquiciadores que determinan el importe del canon como una cantidad fija en dólares basada en diferentes umbrales de ventas. Además, algunos franquiciadores no requieren ningún pago de regalías en absoluto.
Determinación adecuada de los pagos de regalías
Los franquiciadores más exitosos tendrán mucho cuidado en la determinación de sus pagos de regalías requeridas, mientras que algunos franquiciadores simplemente utilizarán lo que sus competidores están requiriendo, o simplemente elegirán un número con poca o ninguna base para ello. Lo ideal es que el franquiciador fije el importe del canon a un nivel que permita al franquiciado llevarse a casa un beneficio lo suficientemente saludable, después de todos los gastos, de manera que el negocio sea capaz de tener éxito tanto al principio como en el futuro.
Las diferentes industrias y modelos de ingresos llevan a esas industrias a estrategias específicas para establecer los importes del canon. No hay una única forma que sea necesaria, por lo que los franquiciadores pueden ser tan creativos como quieran.