Una abuela paterna es una figura importante en la vida de un niño, ya que proporciona una fuente única de sabiduría y orientación.

Muchos padres recurren a los abuelos para que les ayuden a criar a sus hijos. Las largas jornadas de trabajo, el agotamiento, las responsabilidades en el hogar o un periodo de enfermedad son algunas de las razones por las que las abuelas y los abuelos pueden echar una mano en la crianza de sus nietos.

En muchas familias, sin embargo, es la madre materna la que desempeña este importante papel. Entonces, ¿qué pasa con la abuela paterna?

El papel de la abuela paterna en su familia

Por alguna razón, el papel de la abuela paterna ha pasado a ser secundario en muchas familias. Es la madre de su marido y su suegra. Sin embargo, los niños suelen perder la oportunidad de pasar tiempo con esta abuela.

Este tema ha despertado el interés de los investigadores. Algunos estudios apuntan a un efecto diferente cuando la abuela paterna está presente en la vida de los niños, a diferencia de su abuela materna. Sin embargo, se necesitan más trabajos para comprobar estas hipótesis.

Pero más allá de las investigaciones, no cabe duda de que tanto las abuelas maternas como las paternas tienen un intenso vínculo con sus nietos. Recuerde tener esto en cuenta cuando programe tiempo con los abuelos.

Conflicto entre las abuelas maternas y paternas

La tendencia a dejar a los niños al cuidado de la abuela materna puede provocar conflictos y celos por parte del otro lado de la familia. En algunos casos, esto puede incluso provocar problemas en la relación de pareja.

Como madre, debes ser consciente de que tu relación con tu suegra puede afectar a lo que tus hijos sienten o piensan sobre su abuela paterna.

Si no te llevas demasiado bien con ella, tus hijos también pueden rechazar a la madre de su padre. Los niños pequeños pueden incluso tener miedo de su abuela paterna.

Mantener una buena relación con la abuela paterna

Es importante abordar este asunto de forma razonable. Tenga en cuenta los siguientes puntos:

  • No es buena idea forzar a sus hijos a relacionarse con un abuelo en particular. Deje que sus hijos desarrollen el afecto por su abuela paterna de forma natural.
  • No haga comentarios negativos sobre su suegra delante de sus hijos.
  • Deje que sus hijos establezcan sus propios límites en relación con sus abuelos.
  • Como madre y pareja, intente mantener una relación abierta y positiva con su suegra. Sus hijos aprenderán de su ejemplo.
  • Planifique actividades que la incluyan, como una salida al parque o una comida especial.
  • En la medida de lo posible, permítale ayudar como desee. Puede que quiera cuidar de los niños a veces, o contribuir económicamente. Esto la ayudará a sentirse útil y querida.

La importancia de la abuela paterna

No hay razón para dejar a la abuela paterna fuera de la crianza de sus hijos. El vínculo que los niños forman con sus abuelos puede marcar su desarrollo y las relaciones que tengan con otras personas en el futuro.

Pasar tiempo con esta abuela es también una gran manera de fortalecer la relación con su padre.

Recuerda que el amor de una abuela hacia sus nietos es muy similar a los sentimientos que tiene hacia su hijo, que ahora es padre de sus propios hijos.

Como madre, entiendes este vínculo y puedes contribuir a construirlo de la mejor manera posible.

Fomenta una relación estrecha basada en el respeto mutuo entre tus hijos y su abuela. Ella no es sólo la madre de tu marido. También es una abuela para tus hijos.

El vínculo entre un niño y su abuela no es algo natural. A veces habrá que ayudar a que se desarrolle. Las abuelas no son madres sustitutas.

Pero siempre que los padres estén de acuerdo, es bueno que pasen tiempo de calidad con sus nietos. Esto les ayudará a construir una relación que va más allá de los genes que comparten.

Las abuelas, por su parte, pueden contribuir a construir una relación positiva. Deben evitar contradecir las decisiones de los padres, incluso si no están de acuerdo con la forma correcta de criar al niño.

Por último, hay que tener en cuenta que cada abuelo es único e imposible de sustituir. Los padres deben hacer un esfuerzo para que los niños compartan tiempo con cada uno de ellos.

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