Las alergias no causan directamente la presión arterial alta, pero pueden ser un factor indirecto debido a la inflamación.
La presión arterial alta puede conducir a una serie de problemas de salud graves, como las enfermedades del corazón, por lo que es importante entender cómo las alergias pueden conducir a la presión arterial alta.
Alergias, inflamación y presión arterial
Cuando su cuerpo está expuesto a un alérgeno, como el polen o el polvo, su sistema inmunológico trata de proteger el cuerpo mediante la producción de anticuerpos para combatir el alérgeno. Este proceso, llamado inflamación, es lo que provoca la(s) reacción(es) alérgica(s) que usted experimenta.
Una respuesta inflamatoria a los alérgenos aumenta el flujo sanguíneo en la zona afectada. La inflamación también puede constreñir los vasos sanguíneos y las arterias que conducen a órganos importantes como el corazón y los riñones. Este endurecimiento de las arterias puede provocar una presión arterial elevada, y es perjudicial si no se trata.
¿Cómo pueden las alergias provocar hipertensión arterial?
Las alergias pueden tener un efecto cíclico que provoque hipertensión arterial. Por ejemplo, si tiene alergias estacionales, es posible que tenga la nariz constantemente congestionada.
Aunque la nariz congestionada puede ser molesta, es posible que no la vea como motivo de preocupación. Sin embargo, la congestión nasal causada por las alergias puede provocar apnea del sueño, un problema de salud mucho más grave.
La apnea del sueño se produce cuando la respiración se interrumpe durante el sueño. La apnea del sueño suele producirse cuando las vías respiratorias se estrechan, como ocurre cuando se experimenta una congestión nasal debido a las alergias.
Esta inflamación de las vías respiratorias durante el sueño puede provocar una presión arterial alta, que a su vez puede empeorar la apnea del sueño y la congestión nasal.
Con el tiempo, la presión arterial alta debida a la apnea del sueño no tratada puede provocar una enfermedad cardíaca o incluso un accidente cerebrovascular. Conozca cuándo sus alergias se convierten en un problema médico.
Opciones de tratamiento de las alergias
El control de las alergias puede disminuir el riesgo de padecer hipertensión arterial. Basándose en su historial médico, su médico de PartnerMD le recomendará opciones de tratamiento preventivo antes de recetarle medicamentos.
Estas medidas pueden incluir tratamientos locales como lavados salinos para despejar los conductos nasales. Si sus alergias persisten a pesar de las medidas preventivas, su médico puede recomendarle aerosoles nasales recetados para combatir los síntomas de la alergia.
Si tiene problemas de salud coexistentes, su médico puede recomendarle que no tome ciertos medicamentos, como la pseudoefedrina, que puede aumentar la presión arterial.
La medicina personalizada garantiza que su médico se tome el tiempo necesario para comprender realmente la causa de sus síntomas de alergia. Aunque las alergias no son una causa directa de la presión arterial alta, los síntomas de alergia no tratados pueden conducir a problemas de salud que causan presión arterial alta.
Mantenga su presión arterial bajo control, y póngase en contacto con PartnerMD hoy mismo para obtener más información sobre un plan de gestión de alergias que funcione para usted.