Vista humana
3D significa tridimensional, es decir, algo que tiene anchura, altura y profundidad (longitud). Nuestro entorno físico es tridimensional y nos movemos en 3D cada día.
Los humanos somos capaces de percibir la relación espacial entre los objetos con sólo mirarlos porque tenemos percepción 3D, también conocida como percepción de profundidad. Cuando miramos a nuestro alrededor, la retina de cada ojo forma una imagen bidimensional de nuestro entorno y nuestro cerebro procesa estas dos imágenes en una experiencia visual 3D.
Sin embargo, es importante señalar que tener visión en ambos ojos (visión estereoscópica o binocular) no es la única forma de ver en 3D. Las personas que sólo pueden ver con un ojo (visión monocular) pueden seguir percibiendo el mundo en 3D, e incluso pueden no ser conscientes de que son estereociegos. Simplemente les falta una de las herramientas para ver en 3D, por lo que confían en otras sin pensar en ello.
Aquí están algunas de las herramientas que los humanos utilizan para la percepción de la profundidad:
- Visión estereoscópica: Dos ojos proporcionan imágenes ligeramente separadas; los objetos más cercanos aparecen más separados que los lejanos.
- Acomodación: Al enfocar un objeto cercano o lejano, las lentes de los ojos cambian físicamente de forma, proporcionando una pista sobre la distancia del objeto.
- Paralaje: Al mover la cabeza de un lado a otro, los objetos más cercanos parecen moverse más que los lejanos.
- Familiaridad con el tamaño: Si conoce el tamaño aproximado de un objeto, puede saber aproximadamente a qué distancia se encuentra en función de su tamaño. Del mismo modo, si sabe que dos objetos tienen un tamaño similar pero uno parece más grande que el otro, asumirá que el objeto más grande está más cerca.
- Perspectiva aérea: Debido a que la luz se dispersa aleatoriamente por el aire, los objetos lejanos parecen tener menos contraste que los cercanos. Los objetos lejanos también parecen menos saturados de color y tienen un ligero matiz de color similar al del fondo (normalmente azul).
Para representar el mundo 3D en una superficie plana (2D) como una pantalla de visualización, es deseable simular tantas de estas herramientas de percepción como sea posible. Aunque actualmente no hay forma de simularlas todas al mismo tiempo, el vídeo utiliza una combinación. Por ejemplo, la perspectiva aérea y la familiaridad con el tamaño son captadas automáticamente por la cámara de vídeo. En las escenas CGI, hay que añadir la perspectiva aérea para que los objetos lejanos aparezcan con menos claridad (esto se llama niebla de distancia).
Por supuesto, la adición de imágenes estereoscópicas (una imagen separada para cada ojo) es una mejora significativa, hasta el punto de que la mayoría de la gente piensa que las películas estereoscópicas son en 3D, y todas las demás en 2D.
Película 2D &Vídeo
Una imagen de vídeo 2D tradicional tiene anchura y altura, pero técnicamente no tiene profundidad, es decir, todo en la imagen se presenta a la misma distancia del espectador. Aun así, el espectador percibe la imagen como tridimensional mediante el uso subconsciente de las técnicas mencionadas anteriormente, de la misma manera que los estereociegos perciben el mundo real.
Foto de Pete Souza
Película 3D &Vídeo
El vídeo 3D añade la visión estereoscópica, lo que significa que se muestran dos imágenes separadas simultáneamente, una para cada ojo. Esto presenta enormes problemas técnicos, por lo que aún no existe un sistema perfecto, casi 100 años después de que se realizara la primera película en 3D.
Los métodos de visualización más comunes son:
- Procesamiento anaglífico (gafas rojo/cian): El sistema original de 3D, ahora ampliamente en desuso.
- Sistema de luz polarizada (gafas con filtro polarizado): El nuevo sistema más común para los cines.
- Sistema de obturador activo (gafas de obturador LCD): El estándar más probable para la primera generación de televisores 3D y otras pantallas.
Para más información, véase sistemas de vídeo de película 3D &.