Shakespeare enamorado, película estadounidense-británica, estrenada en 1998, que era una imaginación desenfadada e inteligente de cómo se llegó a escribir y producir la obra de William Shakespeare Romeo y Julieta. La película, que satiriza la vida teatral y juega con lo que se sabe y lo que se desconoce sobre la vida y la época de Shakespeare, ganó el Premio de la Academia y el Premio BAFTA a la mejor película, así como el Premio Globo de Oro a la mejor comedia o musical.
Al comenzar la película, Philip Henslowe (interpretado por Geoffrey Rush), el propietario del Teatro de la Rosa, está siendo torturado porque debe dinero a Hugh Fennyman (Tom Wilkinson). Henslowe convence a Fennyman de que la nueva comedia que está escribiendo para él Will Shakespeare (Joseph Fiennes), Romeo y Ethel, la hija del pirata, aportará suficiente dinero para cubrir la deuda. Sin embargo, Shakespeare sufre un bloqueo de escritor y no ha escrito nada. Más tarde, en una taberna, otro dramaturgo, Christopher Marlowe (Rupert Everett, en un papel no acreditado) ofrece a Shakespeare sugerencias para el argumento de la obra. Henslowe, creyendo que la obra está casi terminada, organiza audiciones. Thomas Kent, un actor que se presenta a la audición para el papel de Romeo, impresiona a Shakespeare pero huye del teatro. Shakespeare le sigue, sin saber que en realidad es una joven noble, Viola De Lesseps (Gwyneth Paltrow), hasta la casa de Viola. La enfermera de Viola (Imelda Staunton) acepta una nota de Shakespeare para Kent en la que le comunica que ha sido elegido para el papel. Esa noche, Shakespeare se cuela en una fiesta para celebrar el compromiso de Viola con Lord Wessex (Colin Firth), pero cuando Wessex nota la evidente atracción entre Shakespeare y Viola, amenaza a Shakespeare, que da su nombre como Christopher Marlowe y huye de la fiesta. Sintiéndose inspirado, Shakespeare comienza entonces a escribir la obra.
Al día siguiente, en el teatro, John Webster (Joe Roberts), que buscaba el papel de Ethel, es despedido, y el engreído actor Ned Alleyn (Ben Affleck) es persuadido para interpretar el papel de Mercucio. Después del ensayo, Shakespeare descubre que Kent, el actor que interpreta a Romeo, es en realidad Viola, y él y Viola comienzan una relación amorosa mientras él sigue trabajando en la obra, que se convierte en Romeo y Julieta. Más tarde, Viola es convocada a una audiencia con la reina Isabel (Dame Judi Dench), debido a su compromiso con Wessex, e Isabel la reconoce como una compañera de teatro. La escritura, los ensayos y la relación amorosa entre Viola y Shakespeare continúan, pero Webster los espía y alerta a Tilney, el Maestro de las Revelaciones (Simon Callow), de que uno de los actores es una mujer (lo cual está prohibido), y el Maestro Tilney cierra el Teatro de la Rosa. Mientras los actores lloran la desaparición de su obra y de su empleo, Richard Burbage (Martin Clunes), propietario del teatro rival Curtain, se ofrece a representar la obra. Los ensayos continúan, con Shakespeare interpretando a Romeo, y la obra se estrena el mismo día en que Viola se casa con Wessex. Después de la boda, la enfermera de Viola la ayuda a escapar al teatro para ver la obra. El actor que va a interpretar a Julieta sufre repentinamente el cambio de voz propio de la pubertad y Viola le sustituye en el papel de Julieta. Durante la producción, llega Wessex. La obra es un éxito, pero el maestro Tilney se presenta para arrestarlos a todos por montar una obra con una mujer como actriz. La reina Isabel está entre el público, y se revela de repente y declara que el actor que interpreta a Julieta es Thomas Kent. Viola y Wessex parten hacia la plantación de Wessex en América, y Shakespeare comienza a escribir una nueva obra, Noche de Reyes.
El guionista Marc Norman, inspirado por la sugerencia de uno de sus hijos, comenzó a escribir un guión para Shakespeare enamorado a finales de los años 80 y lo vendió a Universal Pictures. El estudio contrató entonces al dramaturgo Tom Stoppard para que completara el guión. Sin embargo, el proyecto fracasó y permaneció inactivo hasta que Miramax Films se involucró y John Madden se incorporó a la dirección. Aunque la película fue un éxito de taquilla y de crítica, su triunfo en los premios de la Academia se consideró una gran sorpresa, ya que se esperaba que la película de la Segunda Guerra Mundial Salvar al soldado Ryan ganara el premio a la mejor película.