La prevención y el tratamiento de los coágulos sanguíneos implican principalmente el uso de medicamentos anticoagulantes o, como se les conoce comúnmente, «diluyentes de la sangre». Aunque estos medicamentos no «diluyen» realmente la sangre, frenan la capacidad del organismo para formar nuevos coágulos y evitan que los existentes aumenten de tamaño.
Los anticoagulantes suelen administrarse en el hospital, especialmente durante los primeros 5 a 10 días tras el diagnóstico, considerados la fase más grave o aguda de la enfermedad. Sin embargo, los anticoagulantes pueden recetarse inicialmente para uso domiciliario en individuos con perfiles de riesgo adecuados. Para muchos pacientes, el tratamiento en casa con anticoagulantes puede continuar durante semanas, meses o años después de la hospitalización para evitar la reaparición de coágulos.
El cuidado de seguimiento con anticoagulantes es una parte crucial de su tratamiento. Asegúrese de tomar siempre la medicación tal como se le ha prescrito, de acudir a todas las citas y de mantener una comunicación regular con su médico. Informe siempre a su médico si experimenta algún síntoma de coágulo sanguíneo y/o posibles efectos secundarios de la medicación. También es una buena idea conocer los resultados de sus pruebas a lo largo del tratamiento y proporcionar a su médico una lista de los medicamentos que toma para ayudar a controlar las posibles interacciones entre ellos. Del mismo modo, asegúrese de hacer cualquier pregunta o discutir todas sus preocupaciones durante sus visitas al médico.
Lo siguiente es un resumen de las diversas categorías de anticoagulantes y otros tratamientos que debe complementar la información proporcionada por su médico:
Medicamentos anticoagulantes o diluyentes de la sangre
Los anticoagulantes más comúnmente prescritos son la heparina no fraccionada, la heparina de bajo peso molecular, la warfarina y los anticoagulantes orales directos. Haga clic en los siguientes enlaces para obtener información sobre cada anticoagulante:
- Heparina no fraccionada (HNF)
- Heparina de bajo peso molecular (HBPM)
- Warfarina
- Medicamentos anticoagulantes orales directos (ACOD)
Otros tratamientos
Además de los anticoagulantes, puede necesitar otras intervenciones, incluyendo: procedimientos quirúrgicos, dispositivos implantables u otros medicamentos y productos. Haga clic en los siguientes enlaces para obtener más información sobre estos tratamientos:
- Medias de compresión
- Terapia trombolítica
- Trombectomía mecánica
- Filtros de vena cava