Si eres como yo, es casi imposible que salgas de un salón de belleza sin estropear tus uñas recién pintadas. Me rajo, mancho o hago que mi mani sea horrible casi siempre. ¿Y cuando me las hago yo misma? Un desastre.
Debido a que tengo un gran evento (una reunión de la escuela secundaria, dispárenme) que se avecina, decidí hablar con un par de profesionales sobre la mejor manera de mantener una manicura libre de manchas.
Aquí hay cuatro consejos que los expertos recomiendan probar para un conjunto perfecto cada vez.
1.Deja secar la primera capa durante al menos 5 minutos antes de aplicar la segunda. Si la primera capa no está completamente seca, la segunda se vuelve blanda y tendrás que esperar el triple para que el esmalte se endurezca.
2.Utiliza un spray de secado rápido — realmente funcionan — y no tienen por qué ser malos para el medio ambiente. (¿Mi favorito? OPI RapiDry Spray. Reduce el tiempo de secado a casi la mitad y, a diferencia de muchos otros, viene en una botella con bomba en lugar de una lata de aerosol, por lo que no es perjudicial para la capa de ozono).
3.Aplique aceite a las uñas recién pintadas para ayudar a acelerar el proceso de secado. También les dará un bonito (aunque temporal) brillo. (Consejo: Vacía un bote de esmalte transparente, lava el pincel y llena el bote con aceite de oliva).
4.Sumerge las manos en un recipiente con agua helada. El frío ayuda a solidificar el esmalte.
Oooh, y aquí tienes un gran truco para poder saber si tus uñas están realmente secas: Cuando sospeches que lo están, toca suavemente dos uñas entre sí – están bien y listas cuando se separan sin una sensación pegajosa y hortera.
¿Tienes algún consejo para «salvar mi manicura» que compartir?