Sin embargo, hay algunos matices dentro de esta afirmación general, que pueden resultarte interesantes si eres un viajero nervioso o simplemente tienes curiosidad por saber cómo vuelan los aviones. Siga leyendo para saber por qué los días de lluvia (casi) nunca impiden volar a los aviones.

¿Cómo vuelan los aviones bajo la lluvia?

Las alas y los motores de los aviones actuales trabajan juntos para producir «sustentación», que mueve el avión hacia arriba del suelo cambiando la dirección y la presión del aire. En general, la lluvia no impide este proceso; en la mayoría de los casos, la respuesta a si los aviones pueden volar bajo la lluvia es un rotundo «sí».

La lluvia no suele ser suficiente para impedir que un avión despegue

Esto es cierto tanto a la hora de despegar como cuando un avión se encuentra a una altitud de crucero (normalmente en torno a los 35.000 pies), ya que la mayor parte de la lluvia se produce en niveles más bajos de la atmósfera. Por este motivo, el cielo fuera de un avión suele estar limpio, aunque el tiempo en tierra sea lluvioso o esté nublado.

¿Cuánta lluvia puede hacer aterrizar un avión?

La intensidad de la lluvia no afecta a la respuesta a la pregunta «¿vuelan los aviones con lluvia? Técnicamente hablando, la elevación puede producirse independientemente de la intensidad de la lluvia. Dentro de este paradigma, surgen dos cuestiones principales: La visibilidad y las condiciones meteorológicas auxiliares.

La lluvia muy intensa puede perjudicar la visibilidad del piloto

Si la lluvia es demasiado intensa, la visibilidad del piloto puede verse afectada, lo que puede hacer que no sea seguro despegar, impidiendo así que su avión vuele. En raras circunstancias, la lluvia intensa también puede hacer que los motores de un avión se apaguen, aunque los pilotos suelen poder volver a encenderlos.

Lluvia helada y vuelo

La lluvia que cae a gran altura (donde las temperaturas son mucho más frías que a nivel del suelo) puede, en muy raras ocasiones, congelarse en las alas de un avión. Esto presenta la remota posibilidad de una entrada en pérdida, una reducción de la sustentación que puede hacer que el avión caiga del cielo si los pilotos no son capaces de recuperar la sustentación. Por suerte, casi siempre lo consiguen

La lluvia a gran altura puede congelarse, causando muy ocasionalmente complicaciones

También los vientos fuertes, los relámpagos y otras condiciones adversas suelen acompañar a la lluvia intensa, y a menudo son suficientes para impedir que un avión vuele. Por otra parte, si las temperaturas son inferiores al punto de congelación, la lluvia puede congelarse cuando toca el suelo, lo que puede crear condiciones de pista resbaladiza que no son adecuadas para el despegue. La lluvia helada también puede adherirse a la propia aeronave, lo que requiere el deshielo antes del vuelo en este caso.

¿Pueden aterrizar los aviones con lluvia?

La lluvia puede afectar a la capacidad de una aeronave para aterrizar de la misma manera que afecta a su capacidad para despegar. Es decir, si la lluvia en el suelo es demasiado intensa, el piloto no puede ver lo suficientemente bien como para aterrizar el avión; o las condiciones meteorológicas acompañantes pueden hacer imposible un aterrizaje inseguro.

La lluvia generalmente no afecta a la capacidad de un avión para aterrizar

Los neumáticos de los aviones son extremadamente resistentes, por lo que la lluvia generalmente no puede manchar la pista lo suficiente como para hacer el aterrizaje inseguro. Sin embargo, una vez más, las temperaturas de congelación pueden cambiar la respuesta a la pregunta «¿pueden los aviones volar bajo la lluvia?»: ¡una pista congelada puede ser casi imposible de aterrizar! Visite National Geographic para saber más sobre cómo los pilotos determinan si el tiempo es seguro para volar.

Accidentes aéreos históricos causados por la lluvia

Aunque el tiempo es responsable de hasta una cuarta parte de los accidentes aéreos en todo el mundo, la lluvia por sí sola casi nunca ha hecho caer un avión. Una notable excepción fue el vuelo 421 de Garuda Indonesia, que sufrió un incendio sobre la isla de Java en 2002. Los pilotos no pudieron volver a poner en marcha los motores y tuvieron que aterrizar el avión en un río, lo que resultó un éxito, aunque un auxiliar de vuelo murió debido a los daños sufridos por la aeronave.

Se han producido varios incidentes aéreos notables debido a la entrada en pérdida, que, como se ha señalado, a veces puede ocurrir como resultado de la lluvia congelada en el ala de un avión. Sin embargo, otras condiciones además de la lluvia contribuyeron a los accidentes de vuelos como el de Air France 447 en 2009 y el de Air Asia 8501 en 2014, por nombrar sólo un par de ejemplos relativamente recientes.

Conclusión

¿Vuelan los aviones con lluvia? La respuesta es » sí» en la mayoría de los casos, aunque hay que tener en cuenta algunos puntos más finos:

  • La lluvia intensa puede perjudicar la visibilidad del piloto
  • Otras condiciones meteorológicas (vientos, rayos, etc.) pueden acompañar a la lluvia intensa
  • Pueden producirse «apagones» que obliguen a los pilotos a volver a encender los motores
  • La lluvia a gran altura puede congelarse y hacer que el avión entre en «pérdida»
  • La lluvia helada a nivel del suelo puede presentar peligros adicionales

Los aviones modernos son extremadamente capaces, y también lo son los pilotos que los pilotan. Así que relájese, respire hondo y busque vuelos en Skyscanner que le lleven a su próximo destino

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