La edad de su hijo
Independientemente de la edad de su hijo, el equilibrio y la coordinación son necesarios para montar en bicicleta; aún más cuando los estabilizadores no están ahí para proporcionar apoyo adicional. Hay que tener en cuenta ciertos factores físicos a la hora de pensar en retirar los estabilizadores de la bicicleta de tu pequeño.
A continuación, te detallamos cómo encajan ciertos grupos de edad con los estabilizadores:
Tres y cuatro años
Típicamente, los niños de tres y cuatro años están desarrollando sus habilidades motoras y aprendiendo sobre el equilibrio y los diferentes movimientos con las piernas y los pies. Por lo tanto, son más adecuados para montar en vehículos de tres ruedas.
Por otra parte, hay casos en los que la coordinación y el control muscular están lo suficientemente desarrollados como para permitirles montar en bicicletas más pequeñas con ruedas de entrenamiento. Esto desarrolla su destreza y ayuda a que su hijo se deshaga de las ruedas de entrenamiento más pronto que tarde.
Cuatro y cinco años
Una vez que los niños llegan a su cuarto o quinto año, se interesan más por lo que hacen otros niños y pueden dejarse influenciar fácilmente cuando ven a un niño del vecindario montar en bicicleta sin estabilizadores. Para entonces, la mayoría de los niños de cinco años han desarrollado el equilibrio necesario para manejar una bicicleta sin estabilizadores.
Sin embargo, es muy probable que aún no comprendan el peligro que conlleva. Según los estudios, los niños de esa edad corren un riesgo mucho mayor de lesionarse al montar en bicicleta sin ruedines. Aunque eso puede evitarse con la supervisión adecuada y la ayuda de un adulto.
De los seis a los doce años
Los seis años es la edad media general para montar en bicicleta sin estabilizadores porque ya dominan el arte de hacerlo y han aprendido a evitar los peligros con la ayuda de sus padres. Los niños de seis años también han desarrollado la suficiente fuerza en las manos para utilizar los frenos del manillar con precisión.
Los niños de entre nueve y doce años suelen tener suficiente experiencia para controlar las bicicletas de varias velocidades y marchas. Sin embargo, estos niños corren un mayor riesgo de intentar movimientos peligrosos como el exceso de velocidad, las acrobacias y la conducción en el tráfico.