Emilio Barzini es un personaje de ficción de la serie de novelas y películas El Padrino, donde era el jefe de la familia criminal Barzini.

Biografía

A principios de los años 30, Barzini se convirtió en uno de los capos de la organización de Giuseppe Mariposa, junto con su hermano Ettore. Empezó a estar descontento con Mariposa después de que éste asesinara a su amigo «Tits» por mera sospecha de traición, y después de que el intento de Barzini de asesinar a Vito Corleone en un desfile se convirtiera en una masacre, empezó a ver cómo cambiaban las tornas y traicionó a su jefe Giuseppe Mariposa por Vito Corleone.

Subida al poder

Tras la muerte de Mariposa, Barzini se hizo con los restos de la organización de Mariposa y presidió como jefe de la rebautizada familia Barzini. Bajo su liderazgo reconstruyó la familia hasta ser considerada la segunda familia criminal más poderosa tanto en Nueva York como en la nación, sólo por detrás de Vito Corleone. Barzini tenía intereses en mercados como el de los estupefacientes, el juego y la prostitución, y también era lo suficientemente inteligente como para interesarse por Las Vegas y Cuba. También estaba vinculado a la política de Wall Street y a la mafia de Sicilia.

Papel en la guerra

Barzini era lo suficientemente respetado por Don Corleone como para ser invitado a la boda de su hija Connie aunque Vito sabía que Barzini intentó asesinarle. Barzini tenía interés en expandirse en el tráfico de drogas presentando a Sollozzo a Bruno Tattaglia. Barzini utilizó a la familia Tattaglia como peón para acercarse a Vito Corleone. Sin embargo, cuando Vito se negó a participar en el tráfico de heroína, Sonny se mostró decepcionado por la decisión. Barzini y Sollozzo conspiraron en secreto con las demás familias para obligar a los Corleone a abrir su territorio al tráfico de drogas. Tras dos intentos de asesinato por parte de la familia Tattaglia, los Corleone y los Tattaglia entraron en guerra. Mientras que Barzini fue protegido de la guerra. Tras la muerte de Virgil Sollozzo y Mark McCluskey, Barzini animó a todas las familias a entrar en guerra con los Corleone debido a la atención policial adicional que provocó la Guerra de las Cinco Familias. Sin embargo, lo más probable es que Barzini buscara venganza por la muerte de Sollozzo.

Barzini se acercó a Carlo Rizzi después de un altercado que ambos tuvieron en público, con un plan para atraer al jefe en funciones Sonny Corleone al peaje de Jones Beach Causeway, donde fue emboscado y asesinado. Don Corleone prohibió cualquier investigación sobre la muerte de Sonny, y en su lugar pidió a Barzini que le ayudara a organizar una cumbre de paz. Fue en esta reunión donde Don Corleone descubrió que Philip Tattaglia, como aparente instigador de la guerra contra la familia Corleone, no llevaba la voz cantante. Barzini era el titiritero que orquestaba discretamente la alianza anti-Corleone. Tattaglia traicionó su verdadero y disminuido papel al buscar desesperadamente la promesa de paz de Don Corleone, y acudir a Barzini para que le diera su aprobación y le garantizara protección. Barzini había utilizado sus contactos en la mafia siciliana para asesinar a Michael Corleone con un coche bomba. Sin embargo, Apollonia, la esposa de Michael, fue asesinada por el coche bomba destinado a Michael.

Caída

No satisfecho con la sumisión de los Corleone, Barzini comenzó a asaltar sus territorios en Nueva York. Sin que Don Barzini lo supiera, los Corleone estaban permitiendo que Barzini se inmiscuyera en los intereses de los Corleone para adormecerlo y, poco después de que Michael regresara de su escondite en Sicilia, él y Don Corleone comenzaron a hacer planes para tomar represalias. En el funeral de Vito Corleone, Barzini se dirigió a Salvatore Tessio para que organizara otra cumbre de paz en la que Michael sería asesinado, lo que reveló que Tessio era el traidor. Sin embargo, Barzini no sabía que había caído en una trampa perfectamente preparada.

Unos días después de la muerte de Don Corleone, Barzini fue asesinado en las escaleras del juzgado de la plaza Foley de Manhattan, Barzini salió para encontrar a Al Neri, disfrazado de policía, matando a sus guardaespaldas y a su chófer. Antes de que Barzini pudiera reaccionar, Neri le disparó dos veces por la espalda, mientras se daba la vuelta para huir.

Le sucedió Paul Fortunato.

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