Cada elemento de la Mesa del Hombre Desaparecido representa las emociones y los sentimientos reservados a los que no volvieron a casa. La ceremonia simboliza que están con nosotros, aquí en espíritu. Todos los estadounidenses nunca deben olvidar a los valientes hombres y mujeres que respondieron a la llamada de nuestra nación para servir y lucharon por nuestra libertad con honor.

El simbolismo de la Mesa del Hombre Desaparecido: La mesa es redonda, para mostrar nuestra eterna preocupación por nuestros hombres desaparecidos.
El paño es blanco, simbolizando la pureza de sus motivos al responder a la llamada a servir.
La única rosa roja; expuesta en un jarrón, nos recuerda las vidas de estos americanos y sus seres queridos y amigos que mantienen la fe mientras buscan respuestas.
El lazo rojo simboliza nuestra continua determinación de dar cuenta de nuestros desaparecidos.
Una rodaja de limón nos recuerda su amargo destino; capturados y desaparecidos en una tierra extranjera.
Una pizca de sal simboliza las lágrimas de nuestros desaparecidos y sus familias que anhelan respuestas tras décadas de incertidumbre.
La vela encendida refleja nuestra esperanza por su regreso, vivos o muertos.
La Biblia representa la fuerza obtenida a través de la fe para sostenernos a nosotros y a los perdidos de nuestro país, fundado como una nación bajo Dios.
El vaso está invertido, simbolizando su incapacidad para compartir un brindis.
La silla está vacía, el asiento que queda sin reclamar en la mesa.

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