¿Qué quieres ser de mayor? Qué tal una emocionante carrera como actor o músico? Tal vez prefieras ser jugador de baloncesto o de fútbol? O tal vez te gusten las flores, las hierbas, los árboles y todo tipo de plantas. Si es así, esta Maravilla del Día tiene justo la carrera para ti. Se trata del apasionante mundo de la botánica!
¿Te preguntas cómo puede ser apasionante el estudio de las plantas? Puede que te sorprenda. Echemos un vistazo a lo que hacen los botánicos, o científicos que estudian las plantas.
¿Puedes nombrar todas las plantas del mundo? Por supuesto que no. Hay muchas hierbas, verduras, flores y árboles. El gran número de especies de plantas puede dejarnos perplejos. Como botánico, tendrías un gran número de especies que estudiar.
Los botánicos pueden trabajar en muchos ámbitos. Algunos son profesores o investigadores en colegios y universidades. Otros pueden encontrar trabajo en jardines botánicos, zoológicos o invernaderos. Incluso pueden ser contratados por laboratorios científicos, empresas de medicina o agencias gubernamentales. Muchos botánicos hacen tanto trabajo de laboratorio como de campo.
No hay fin a los tipos de trabajo que podrías hacer como botánico. Podrías estudiar cómo la contaminación o el cambio climático afectan a las distintas especies. Podrías utilizar la genética avanzada para cultivar pantalones nuevos o mejorados. Incluso podrías encontrar una nueva especie o nuevos usos para plantas conocidas. Podrías centrarte en mejorar el rendimiento de los cultivos o en fabricar nuevos medicamentos. Tal vez desarrollarías nuevos combustibles para las crecientes necesidades energéticas del mundo.
Hoy en día, una de cada cinco especies de plantas del mundo está en peligro de extinción. Algunos botánicos trabajan para salvarlas. Un ejemplo es Steve Perlman, del Programa de Prevención de la Extinción de Plantas de la Universidad de Hawai. El trabajo de su vida es preservar las 238 especies de plantas de Hawai que están a punto de extinguirse.
El trabajo de Perlman le lleva al campo con regularidad. Allí, a veces, cerca las especies en peligro de extinción de las cabras y los cerdos de pastoreo. En otras ocasiones, se le puede encontrar haciendo rappel en acantilados o escalando montañas. Lo hace para recoger especímenes en lugares a los que los humanos y los animales no pueden llegar fácilmente. Incluso ha pasado tiempo polinizando a mano los últimos individuos de algunas especies. Pero Perlman te diría que es todo lo contrario. ¿Qué otras emocionantes aventuras botánicas te imaginas?