Si los resultados de una prueba de parche indican sensibilidad a una sustancia específica, nuestros dermatólogos sugieren eliminar completamente esa sustancia de su rutina. Esto puede ser tan fácil como evitar un determinado tipo de limpiador o cambiar el desodorante.
Pero algunas fragancias y conservantes se utilizan en muchos productos, lo que puede hacer que evitarlos sea un reto. Puede ser abrumador y llevar mucho tiempo leer las largas listas de ingredientes para identificar qué productos son seguros de usar.
Nuestros dermatólogos pueden buscar en una gran base de datos de productos comunes y proporcionarle una lista de opciones que son seguras de usar. A menudo, estos productos están disponibles en las farmacias y no son difíciles de encontrar.
Además, los dermatólogos recomiendan tomar medidas sencillas en casa para evitar los desencadenantes comunes, como las temperaturas frías y calientes, los tejidos irritantes y las duchas calientes. Evitar los desencadenantes puede evitar que los síntomas se repitan o empeoren.
Clima
A menudo, hacer cambios en la temperatura dentro de una casa, escuela u oficina ayuda a controlar los síntomas del eczema y la dermatitis. El aire frío y seco puede hacer que la piel se agriete, se escame y se reseque. La piel que carece de humedad es más vulnerable a la irritación.
Utilizar un humidificador además de mantener una temperatura ambiente moderada -nuestros médicos recomiendan entre 68 y 72 grados Fahrenheit- durante los meses de invierno puede ayudar a la piel a retener la humedad.
Durante el verano, el calor y la humedad pueden empeorar el eczema y la dermatitis. El sudor hace que la piel pique y proporciona un entorno para que crezcan las bacterias, aumentando el riesgo de infección. Cuando hace calor, el uso de un acondicionador de aire para mantener el aire fresco y seco puede ayudar a prevenir las erupciones.
Duchas y baños
Las duchas o baños largos y calientes despojan a la piel de aceites y humedad. Nuestros dermatólogos entienden que la mayoría de las personas prefieren bañarse o ducharse a diario, pero recomiendan duchas o baños cortos y tibios. Esto evita la pérdida de las barreras naturales de la piel contra la exposición a irritantes y evita despojar a la piel de sus aceites y defensas naturales.
Fragancias y conservantes
Muchos productos comunes contienen ingredientes que pueden causar dermatitis alérgica. Estos productos incluyen perfumes y colonias, así como loción con fragancia, desodorantes, jabón, baño de burbujas, champú, acondicionador, detergente para la ropa y suavizante.
Muchos de estos productos también contienen conservantes para darles una larga vida útil. Los conservantes de las toallitas limpiadoras pueden permanecer en la piel si no se aclara después de usarlas. Los conservantes también se utilizan en muchos productos de belleza y cuidado de la piel sin fragancia, como las bases de maquillaje y las barras de labios.
Algunas marcas de cremas hidratantes y cosméticos tienen variedades sin perfume y con pocos conservantes, y estas distinciones suelen estar claramente marcadas en el frasco o el envase.
Tejidos irritantes
Los tejidos con texturas ásperas, como la lana y el tweed, pueden causar dermatitis irritante y empeorar otros tipos de erupciones. Además, los pigmentos de los tejidos teñidos pueden ser la fuente de alérgenos químicos que pueden causar dermatitis de contacto. Los médicos recomiendan evitar estos tejidos y elegir ropa de colores claros o sin tintes, hecha de algodón o seda al cien por cien, que es menos probable que irrite la piel.