Cómo forman los bebés el apego
El apego es cuando un bebé y su cuidador forman una fuerte conexión entre sí, emocional y físicamente.
El vínculo con tu bebé es importante. Ayuda a liberar hormonas y sustancias químicas en el cerebro que fomentan un rápido crecimiento cerebral. El vínculo afectivo también favorece el desarrollo de las conexiones entre las células cerebrales que son fundamentales para el aprendizaje; el crecimiento del cuerpo de su bebé; y el desarrollo positivo del sentido de quién es su bebé y de cómo se enfrenta a los disgustos.
Los recién nacidos no saben lo que necesitan. Tienen que ser ayudados por un cuidador que responda con calma a sus necesidades físicas y que también les proporcione mucho amor.
¿A quién se apegan los bebés?
Los bebés suelen apegarse a su cuidador principal, pero ciertamente pueden establecer vínculos con otras personas.
Es habitual que un bebé se apegue a su madre, ya que en el octavo mes de su embarazo, un bebé puede reconocer y calmarse con la voz de la madre mientras está en el útero. Cuando nacen, los recién nacidos pueden incluso reconocer algunos sonidos de la lengua materna.
El padre, los abuelos y los cuidadores importantes también pueden establecer un vínculo con el bebé. Esto es especialmente importante si a la madre le resulta difícil formar un vínculo, está deprimida o hay alguna otra razón por la que no puede prestar toda la atención a su bebé.
Si eres la madre del bebé y éste forma vínculos con otras personas importantes, esto no significa que tu bebé esté menos unido a ti. Ayuda a tu bebé a aprender a estar cerca de las personas.
Cómo crear un vínculo afectivo con tu bebé
Cuando respondas a las necesidades de tu recién nacido, probablemente empezarás a ver comportamientos o señales que demuestran que está apegado a ti. Estas dependerán de su edad y nivel de desarrollo y podrían incluir:
- hacer contacto visual contigo
- sonreír, arrullar, riendo o haciendo otros ruidos dirigidos a ti
- extendiendo los brazos hacia ti
- caminando detrás de ti
- copiándote
- llorando por lo que necesita mientras te mira
- pareciendo interesado en algo que estás haciendo
Responder a tu bebé
No puedes malcriar a un bebé prestándole demasiada atención. Necesita que le ayudes en las cosas que no puede hacer por sí mismo, ya sea cambiándole el pañal, ayudándole a aliviar el dolor o el hambre, dándole calor o dándole mucho cariño y jugando. Responder a lo que quieren y necesitan fomenta su confianza en ti y les ayuda a sentirse seguros.
Las madres están diseñadas biológicamente para actuar cuando sus bebés lloran, por lo que puedes sentirte ansiosa si no puedes responder a tu bebé de inmediato. Si ves que tu bebé tiene todo lo que necesita y está seguro, asegúrate de que estarás allí tan pronto como puedas. Cuando vuelvas a estar con tu bebé, tranquilízalo y consuélalo.
Modo de establecer un vínculo afectivo con tu bebé
Aquí tienes algunas técnicas de establecimiento de vínculos afectivos que puedes probar:
- Aprende a leer las señales de tu bebé y hazle saber que lo entiendes.
- Copia los ruidos o señales de tu bebé y espera a que responda antes de continuar.
- Una vez que haya aprendido lo que le gusta a su bebé, hágalo con regularidad.
- Inicie nuevas actividades con suavidad, en lugar de hacerlo bruscamente, y hable con calma sobre lo que está haciendo.
- Calma y abraza a tu bebé cuando esté molesto.
- Coge a tu bebé en el lado izquierdo de tu pecho, para que pueda oír los latidos de tu corazón.
- Proporciona contacto piel con piel (por ejemplo, mientras le das el pecho). También puedes dar un masaje a tu bebé.
- Sonríe y ríe mientras miras a tu bebé a los ojos.
- Habla, canta, lee libros y jugad juntos a juegos sencillos.
- Baña a tu bebé antes de acostarlo.
¿Qué pasa si no estoy creando un vínculo con mi bebé?
Algunos padres experimentan una conexión instantánea con su bebé en las primeras 24 horas después del nacimiento y lo describen como un sentimiento abrumador de amor y protección.
No se preocupe si no siente esto de inmediato. Aunque el apego es importante para tu bebé, a veces las relaciones pueden tardar en desarrollarse y puede que tardes días, semanas o incluso meses en establecer un vínculo con tu bebé.
Comunícate regularmente con tus familiares y amigos y no te pongas una presión extra. La falta de un vínculo inicial fuerte no significa que no seas una madre «natural».
Si sospechas que puedes estar sufriendo una depresión postnatal, habla con tu médico u otro profesional sanitario, como una enfermera de salud materno infantil y familiar.
Dónde acudir en busca de ayuda
- Habla con tu médico, enfermera de salud infantil o matrona.
- Llama a Embarazo, Nacimiento y Bebé en el 1800 882 436 para hablar con una enfermera de salud materno-infantil.
- Encuentra una línea de ayuda para la crianza que se adapte a ti aquí.
- Llama a Beyond Blue en el 1300 22 4636.