La destreza mental

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Esperamos que la destreza de nuestras articulaciones y pulmones disminuya lentamente a medida que envejecemos, pero la idea de que nuestra mente haga lo mismo es intolerable. He aquí algunos consejos de prevención que valen su peso en ingenio, además de unos cuantos para olvidar.

¡Haga algo!

Los científicos están empezando a pensar que el ejercicio aeróbico regular puede ser lo más importante que puede hacer para la salud de su cerebro a largo plazo. Mientras que el corazón y los pulmones responden con fuerza a un sprint en la cinta de correr, el cerebro también se pone en forma silenciosamente con cada paso. Para mantener la salud mental, intente realizar al menos 30 minutos de actividad física en días alternos.

Come, come, come

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Un exceso de energía o una falta de ella pone en peligro la delicada maquinaria del cerebro. Una dieta de bajo índice glucémico -con alto contenido en fibra y cantidades moderadas de grasa y proteína- se descompone más lentamente en el organismo que los alimentos de alto índice glucémico, como los dulces y los almidones blancos. Un ritmo de digestión constante en el intestino proporciona un flujo de energía más fiable al cerebro, lo que probablemente optimiza la salud y el rendimiento del órgano a largo plazo.

Cuidado con la dieta

Si bien el exceso de consumo puede hacer que el cerebro se vuelva lento y provocar perjuicios a largo plazo para el cerebro, un exceso de calorías también puede perjudicar la función cerebral. Las dietas extremas pueden hacer que algunos incondicionales sientan que están en calma -una sensación que puede ser la base de la adicción a la anorexia-, pero muchos estudios también han relacionado las dietas con la distracción, la confusión y el deterioro de la memoria.

Cuida tu cuerpo

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Las enfermedades en gran medida prevenibles -como la diabetes de tipo II, la obesidad y la hipertensión- también afectan a tu cerebro. Los problemas de salud de todo el sistema se han relacionado con un mayor riesgo de deterioro cognitivo y de la memoria. Mantener el sistema circulatorio en buen estado, por ejemplo, evitando los cigarrillos y las grasas saturadas, disminuye los daños relacionados con la edad en el cerebro.

Descansa bien

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Cuando descansamos y soñamos, los recuerdos se tamizan, algunos se descartan, otros se consolidan y se guardan. Cuando no dormimos, según un estudio reciente, las proteínas se acumulan en las sinapsis, lo que posiblemente dificulta pensar y aprender cosas nuevas. Además, dormir mal de forma crónica (en contraste con no dormir lo suficiente) está relacionado con el deterioro cognitivo en la vejez, aunque la relación puede no ser causal.

Disfruta de tu café

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Cada vez hay más pruebas que sugieren que el hábito de la cafeína puede proteger el cerebro. Según amplios estudios longitudinales, de dos a cuatro cafés al día pueden evitar el deterioro cognitivo normal y reducir la incidencia del Alzheimer entre un 30 y un 60 por ciento. No está claro si los beneficios provienen de la cafeína o de los antioxidantes presentes en el café y el té, pero ese café con leche puede mejorar la cognición esta tarde y dentro de varias décadas.

Come pescado

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Algunas teorías atribuyen a la introducción del pescado en la dieta humana la evolución de nuestra tremenda destreza cognitiva. Los ácidos grasos esenciales, como los Omega 3, son fundamentales para la función cerebral y están demostrando ser beneficiosos para el tratamiento de dolencias cerebrales como la depresión. Sin embargo, los estudios sobre la eficacia de los suplementos de Omega 3 han arrojado resultados contradictorios, por lo que hay que obtener dosis de fuentes alimentarias, como las semillas de lino, los pescados grasos y los animales alimentados con pasto.

Relájate

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El estrés hace mella en el cerebro al arrastrar sustancias químicas nocivas sobre el hipocampo y otras áreas cerebrales implicadas en la memoria. Algunos científicos sospechan que llevar un estilo de vida equilibrado y realizar actividades relajantes como el yoga, la vida social y la artesanía pueden retrasar el deterioro de la memoria al reducir el estrés.

Salte los suplementos

(Crédito de la imagen: Steve Knight (stevekrh19))

Los suplementos han tenido mala fama últimamente, e incluso el conocido multivitamínico parece ahora una pérdida de dinero, o algo peor. Las píldoras para el cerebro, como el ginkgo y la melatonina, probablemente también pertenezcan a la basura. A pesar de su origen «natural», no están exentas de posibles efectos secundarios, como hipertensión, problemas digestivos, problemas de fertilidad y depresión. Y entre los individuos sanos, el ginkgo no ofrece beneficios cerebrales más allá del placebo. (En algunos casos, el placebo funcionó mejor.)

Tease your brain

(Image credit: Jane M Sawyer / MorgueFile)

No se ha establecido bien si los crucigramas, sudokus y otros juegos para el cerebro realmente lo mantienen en forma. Sin embargo, la falta de educación es un fuerte predictor del deterioro cognitivo. Cuanto más haya intentado aprender, mejor será su capacidad mental en la vejez. La clave puede estar en abordar algo nuevo; el reto de lo desconocido es probablemente más beneficioso que armar el mismo rompecabezas una y otra vez.

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