Nada es mejor que un puré de patatas suave y cremoso. Pero le sorprenderá saber que no son los añadidos grasos, como la mantequilla o la nata, los que crean ese puré esponjoso y batido. Es la forma en que se deshacen las patatas -en forma de puré o de papilla- lo que da lugar a la consistencia ideal de este plato tan apreciado.

¿Debe usted triturar o arrojar las patatas? Depende de sus preferencias: si le gustan las patatas ligeras y aireadas, las patatas sin pelar o la herramienta que prefiera. Utilizar tanto el ricer como el pasapurés requiere mucho trabajo, así que ninguna de las dos herramientas es un atajo. No saque el robot de cocina para esta tarea, ya que acabará con un puré de patatas gomoso.

Utilizar un escurridor

Para conseguir un puré de patatas sin grumos, la mayoría de los expertos recomiendan utilizar un escurridor. Un escurridor está formado por la tolva, donde se coloca la patata, y el émbolo, que se presiona para forzar la salida de la patata. Al forzar la patata cocida y harinosa a través de los pequeños agujeros del escurridor se crean trozos de patata del tamaño del arroz (de ahí su nombre) y el aire que se incorpora mientras se presiona contribuye a la ligera esponjosidad.

Si le gusta incluir la cáscara en su puré de patatas (ya sea por su valor nutritivo o porque no quiere el trabajo añadido de quitarla), entonces el escurridor puede no ser la herramienta a elegir. Puede colocar las patatas sin pelar en el ricer, pero tendrá que retirar sistemáticamente las cáscaras del interior de la tolva después de cada tanda.

Una alternativa al ricer es un molino de alimentos, que es una máquina de manivela que fuerza los alimentos a través de pequeños agujeros en un tamiz. Si no tiene un escurridor o un molinillo de alimentos, puede arreglárselas con un colador, utilizando el dorso de una cuchara grande o un cuenco más pequeño con una presión uniforme para empujar las patatas. Esto requiere mucha fuerza, pero funcionará.

Con un pasapurés

No es posible conseguir un puré de patatas ligero y aireado con un pasapurés, pero se puede conseguir una textura sedosa. Para ello, tendrás que ser metódico al utilizar el pasapurés. Tienes que dominar un movimiento simultáneo de presión y giro mientras te aseguras de que estás haciendo puré por todos los bordes de la olla, sin que falte ninguna zona. Asegúrese de que las patatas están completamente cocidas y, si es necesario, añada un poco de líquido para avanzar en el proceso.

Consejo

  • Las patatas cerosas seguirán conservando más textura, incluso cuando se procesen con el ricer. La mayoría de la gente prefiere simplemente triturar o aplastar las patatas cerosas y disfrutar de los grumos de sabor de la patata. Sea cual sea el tipo de patata que utilice, asegúrese de que las patatas cocidas han sido completamente escurridas. Después, devuelva las patatas escurridas a la olla y caliéntelas, mientras las remueve suavemente, para eliminar cualquier humedad residual antes de hacerlas puré o puré.

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