Los stents ureterales, también conocidos como stents de doble J, stents JJ o stents ureterales retrógrados, son catéteres urológicos que tienen dos extremos en forma de «J» (rizados), donde uno se ancla en la pelvis renal y el otro dentro de la vejiga.

Las endoprótesis se utilizan para el paso libre de la orina desde el riñón a la vejiga, en condiciones adversas como los procedimientos urológicos postoperatorios, y anteriormente para la litotricia y las obstrucciones ureterales.

Las endoprótesis ureterales pueden colocarse desde un enfoque anterógrado por un radiólogo intervencionista o un enfoque retrógrado por un urólogo. La colocación de un stent puede sustituir a una nefrostomía percutánea que se haya realizado en el entorno agudo. Esto es popular entre los pacientes, ya que «internaliza» el método de derivación de la obstrucción sin los aspectos negativos de una nefrostomía.

Instrucciones

Los stents pueden utilizarse a corto o largo plazo dependiendo de la indicación:

  • obstrucción por urolitiasis
  • obstrucción maligna (típicamente tumores malignos de la pelvis)
  • estenosis benigna
  • fibrosis retroperitoneal

Contraindicaciones

Contenido pendiente.

Procedimiento

Evaluación previa al procedimiento

Contenido pendiente.

Preparación de la sala

Contenido pendiente.

Equipamiento

La mayoría de las endoprótesis son de plástico, pero ahora se dispone de endoprótesis metálicas para utilizarlas en casos de malignidad para reducir la posibilidad de que crezcan en la endoprótesis. Se trata de una compensación, ya que estos stents son significativamente más caros que los tradicionales.

Existen diversos sistemas de colocación:

  • mecanismo de empuje
  • suelta del hilo
  • vainas (similares a las de un filtro IVC)

El equipo necesario incluye:

  • alambre hidrofílico 0.035 150 cm
  • 145 cm 0.035 Amplatz alambre súper rígido
  • Vainas de 8F
  • Stent ureteral (típicamente 6F, 28 cm)
  • Catéter de 8F (para cubrir la nefrostomía)
  • Medicamentos analgésicos y sedantes (e.ej. meperidina, midazolam)
Técnica

Contenido pendiente.

Cuidados posteriores al procedimiento

Contenido pendiente.

Complicaciones

  • Un extremo del stent puede migrar o, en raras circunstancias, desprenderse completamente
  • urosepsis tras el proceso de inserción
  • fracaso, normalmente debido a una estenosis infranqueable
  • obstrucción (aunque la orina también puede pasar al exterior, no a través de la sonda)
  • incrustación/calcificación – lo que dificulta la sustitución

Resultados

Los stents suelen dejarse un máximo de 3-6 meses. Si es necesario cambiar las endoprótesis a largo plazo (sustitución), suele ser debido a la incrustación.

Historia y etimología

Sorprendentemente, la palabra «endoprótesis» es en realidad un epónimo, originalmente llamado así por Charles Stent (1807-1885), un dentista británico en gran parte olvidado. Inventó un material mejorado para formar impresiones dentales y creó una empresa para fabricarlo. Durante la Gran Guerra, J F Esser, un cirujano holandés, utilizó un molde del compuesto de Stent como fijador para los injertos de piel de los soldados de infantería heridos. Este uso innovador se adoptó rápidamente en la práctica, y la colocación de stents como concepto se extendió rápidamente a múltiples especialidades.

Véase también

  • stent ureteral anterógrado
  • stent ureteral metálico
  • nefrostomía percutánea
  • dispositivos médicos en el abdomen

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