Las madres han envuelto a sus bebés durante miles de años. Tanto si es usted una madre primeriza como una veterana, probablemente le vendrá bien el sueño extra que le proporcionará envolver a su bebé.
Desgraciadamente, envolver a su bebé puede parecer una especie de arte. Envolver esto, arropar aquello. Puede resultar confuso, sobre todo cuando te levantas para darle de comer a las 3 de la mañana. Aprender y practicar el arte de envolver a tu bebé te ayudará a dormir más. También ayudará a tu bebé a sentirse más seguro y reconfortado, igual que cuando estaba en el vientre materno.
¿Por qué envolver a tu bebé?
Puede que pienses que envolver a tu bebé cada vez que se duerme (que es mucho) parece mucho trabajo, pero envolverlo tiene muchos beneficios. Estos son algunos de los que usted y su bebé experimentarán:
- El envolvimiento protege a tu bebé contra su reflejo natural de sobresalto, lo que significa un mejor sueño para ambos
- Puede ayudar a calmar a un bebé con cólicos
- Ayuda a eliminar la ansiedad de tu bebé al imitar tu tacto, lo que ayuda a tu bebé a aprender a autocalmarse
- Mantiene sus manos alejadas de su cara y ayuda a prevenir los arañazos
- Ayuda a tu bebé a dormir más y mejor
- Ayuda a prevenir el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) al mantener elementos innecesarios como almohadas, mantas y peluches fuera de la cuna de su bebé
- Mantiene a su bebé boca arriba mientras duerme
Cómo envolver a su bebé
Si nunca ha envuelto a un bebé, puede parecer un proceso complicado. Pero no tiene por qué serlo. Practica los siguientes pasos unas cuantas veces y serás una profesional.
- Extiende tu manta para envolver al bebé en una superficie suave y plana. Disponga la manta en forma de diamante con la parte inferior del diamante apuntando hacia usted.
- Doble hacia abajo el borde superior de la manta. Esto debería crear una forma de triángulo suelto. Coloque a su bebé con los pies apuntando hacia usted. Su hombro debe estar justo debajo del pliegue de la manta.
- Coloque el brazo derecho de su bebé junto a su cuerpo con el brazo ligeramente doblado. Tire de ese mismo lado de la manta hacia arriba y sobre el brazo derecho y el cuerpo de su bebé, y luego métala por debajo de su bebé. El brazo izquierdo del bebé debe quedar libre.
- Dobla la parte inferior de la manta para envolver al bebé por encima de sus pies. Si la manta es lo suficientemente larga, métela por detrás de su hombro.
- Completa la envoltura tirando del lado restante de la manta hacia arriba y por encima del brazo restante de tu bebé y por encima de su cuerpo.
Consejos de seguridad
Aunque envolver al bebé conlleva numerosos beneficios, debes asegurarte de que lo haces bien para evitar peligros o molestias a tu bebé. Sigue estos consejos de seguridad:
- No lo envuelvas demasiado apretado. Envolver al bebé lo suficientemente apretado como para que no pueda mover las caderas o las piernas puede limitar el desarrollo de la cadera. Procure envolver al bebé lo suficientemente apretado como para que sus brazos se mantengan firmes, sin inmovilizar completamente todo su cuerpo.
- Coloque siempre al bebé boca arriba después de envolverlo.
- Deje de envolver al bebé en cuanto pueda darse la vuelta.
- No duplique las mantas cuando lo envuelva. El grosor adicional podría hacer que tu bebé se acalore demasiado. También puede desprenderse más fácilmente, lo que aumenta el riesgo de asfixia.
Bañar a tu bebé es una buena manera de conseguir que duerma mejor. Cuando tu bebé duerme mejor, tú también lo haces. Una vez que aprenda a envolver a un bebé, ¡sabrá hacerlo mientras duerme (literalmente)!